Cuando el vecino que no puede dormir pierde la cabeza – Party Hard
Son las tres de la madrugada y tus vecinos están de fiesta. Todas las putas noches igual. ¿Qué hay que hacer para que a uno lo dejen dormir tranquilo? ¡Joder, que mañana tengo que levantarme temprano! Estoy ya hasta los mismísimos, voy a bajar y no voy a dejar títere con cabeza.
¿A que te suena la situación? Lo mismo no, y me alegro de que vivas en un barrio tan tranquilo, pero no siempre es así. ¿Qué pasa cuando el vecino al que no dejas dormir pierde la cabeza? Pues que empieza el juego Party Hard. En Party Hard, manejaremos a un personaje que se encuentra en esa misma situación. ¿Su solución? Acabar con todos los fiesteros de la forma más horrible posible y sin que le pillen. ¿Estamos ante un juego de infiltración? Algo así, aunque tampoco esperéis un Metal Gear Solid. Vayamos al meollo del asunto.
Party Hard es un juego corto (de unas 8 horas de duración) con gráficos simulando los 8 bits. La pantalla será fija y en todo momento podremos ver a nuestro personaje, que poco a poco tendrá que ir envenenando, apuñalando y deshaciéndonos de otras formas más creativos de sus vecinos en una fiesta. El problema es que si nos pillan, la policía vendrá a por nosotros, y cuando vean los cuerpos, pasará lo mismo. Además, también tendremos que tener cuidado con los seguratas, los antidisturbios y hasta el FBI.
En un principio, pese a la repetitividad y alta dificultad del juego, puede resultar frustrante por momentos. Aparte de que cada nivel nos tomará de quince minutos a media horita, si nos pillan o nos matan tendremos que empezar desde el principio del nivel. El juego, sin embargo, nos empuja a seguir con el consabido «una pantalla más y lo dejo», lo cual es acompañado por escenarios cada vez más absurdos y la música, que es interesante al principio pero que podemos acabar aborreciendo al cabo de un tiempo.
Party Hard está lleno de humor, y no faltan las situaciones disparatadas. Además, hace poco se añadió un DLC gratuito que añade unos pocos escenarios más que plantean otros niveles distintos a los de la campaña principal. Eso unido a los niveles que hacen los jugadores, dan juego para al menos una semanita de juego.
Por lo demás, los niveles son preciosos aunque puede que al cabo de un tiempo las trampas y formas de asesinar a los participantes de la fiesta se nos antoje como poca cosa. Los escenarios van desde una fiesta en la azotea hasta un concierto New Age lleno de extraterrestres violentos.
Así pues, si el juego es de vuestro gusto y queréis darle una oportunidad, adelante. No es una experiencia larga ni especialmente enrevesada, pero yo me divertí mucho haciendo el cafre. Si tenéis ocasión, probadlo.
Un saludo y un abrazo.
Tertulia friki