Hipótesis del Valle Inquietante
No nos resulta del todo ajena esa sensación inquietante al observar detenidamente una imagen o vídeo de un robot que pretende simular una estética humana, aunque sin conseguirlo del todo bien. Ese contenido a veces nos da una ligera sensación de repugnancia o incomodidad, lo que otros llamarían repelús, pero no sabemos exactamente bien por qué. Lo mismo puede ocurrir con ciertas muñequitas de porcelana, o incluso en caso de algunas animaciones por ordenador, por poner un ejemplo, de videojuegos.
Masahiro Mori fue el primero en formular una hipótesis en este sentido que intenta explicar nuestra repulsa en esos casos, a pesar de apoyarse en otras teorías anteriores como las formuladas por Freud. Según esta hipótesis, existe una gráfica que comenzaría relacionando la empatía de una persona a los cambios estéticos de estos robots. Básicamente, el Valle Inquietante vendría a decir que la gente nos sentimos incómodos o mostraríamos rechazo cuando un robot se asemeja mucho a un humano pero exhibe ciertos defectos que no son comunes entre las personas en general.
Mori explicaría esta teoría mencionando que, en el caso de objetos que fuera sustancialmente distintos estéticamente en su forma a los humanos, cualquier rasgo similar al humano resaltaría más, y esto obtendría cierta empatía. La empatía seguiría creciendo según el robot se volviera estéticamente más «humano», hasta el punto en que sucede una caída en la gráfica, que es la zona en que un robot es muy semejante a una persona pero tiene ciertas deficiencias que nos causan esos sentimientos. A continuación, cuando el robot fuera indistinguible de una persona la gráfica seguiría un crecimiento con respecto a la empatía mucho mayor, hasta llegar a lo que sería el ideal estético de belleza humana, en el cual la empatía humana sería la más alta. La gráfica puede consultarse junto a estas líneas. A esa «caída» en la gráfica se le denominaría «Valle Inexplicable» y es la causa de lo explicado anteriormente.
Pero, ¿por qué ocurre esto? Existen diversas posibles explicaciones, en su mayoría hablamos de paralelismos con la empatía en la propia naturaleza humana. Los robots que caen en ese «Valle Inquietante» son aquellos que muestran similaridades con humanos enfermos o muertos, incluso con humanos que podrían parecer muertos y que, sin embargo, continúan moviéndose (algo así como muertos vivientes). Por poner unos ejemplos, la escasa coordinación o movimientos mecánicos poco fluidos podrían ser vistos de manera instintiva como una persona con lesiones cerebrales, o las deficiencias visuales de los androides podrían ser interpretados como signo de enfermedad o incluso establecer paralelismos con los presentados por un cadáver.
Además, esto vendría también a explicar ciertas condiciones de los robots que también puede causar cierta incomodidad. Un androide de este tipo que se esté desmontando puede parecerse a una mutilación. De esta misma forma, si fuera decapitado o desguazado podría representar las consecuencias de un campo de batalla, por lo que sería lógico que provocara nuestro rechazo. En cualquier caso, esta incomodidad parece estar íntimamente ligada con el sentido de la mortalidad de los propios seres humanos.
Tras esta explicación tan larga y relativamente chapucera, me extraña mucho que no se haya tenido en consideración esta hipótesis en general para el diseño de los juegos de rol. Cierto, muchos de ellos presentan variantes de esta forma, pero no conozco ninguno que le conceda mucho protagonismo, ni siquiera que tenga un papel medianamente importante en el juego. Quizás sea una buena idea a explotar. De todos modos, recordad que esto es sólo una hipótesis, y que hay también fuertes críticas en contra de ella. Si queréis seguiros informando os aconsejo que busquéis en Google. El tema tiene miga, de verdad.
Un saludo y un abrazo.
Imagen de cabecera por Brett Davis, titulado Creepy Robot Friend II, con licencia CC-BY-NC. La última imagen ha sido tomada por Steve Jurvetson, se titula HALLE’s Eye y tiene licencia CC-BY. La gráfica ha sido tomado de Wikipedia, por Edgar Talamantes y está distribuida bajo licencia CC-BY-SA.
Tertulia friki